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KMC aporta especialización frente a los todopoderosos Shimano o SRAM, se trata de una marca especializada desde el año 1977 en diseñar y construír cadenas y eso tiene sus ventajas. No obstante, KMC tiene que rendirse a la lógica del mercado y concibe sus cadenas para unos engranajes perfectos con los sistemas de casete y platos actuales: derivados del Hyperglide de Shimano.
El modelo estrella de la marca, X-9 SL (también X-10 SL para carretera) destaca en primer lugar por sus dos versiones disponibles: la clásica en plata y también en dorado. Ambas tienen un peso de sólo 242 g para 110 eslabones, una buena marca, conseguida con una economía de material posible merced a las ventanas en los links exteriores e interiores, contruídos en una aleación de acero especialmente ligera y resistente al estiramiento y a los bulones huecos. Esta marca es claramente inferior a los pesos de la competencia directa: Shimano declara para su cadena XTR un peso de 304 g. con 116 eslabones, que suponen 288 g con 110 eslabones, mientras que la SRAM PC9 Hollow Pin declara 279 g con 114 eslabones, 270 g con 110 eslabones.
Todas las piezas de la versión Gold disfrutan de un baño Titanium Nitride que reduce la fricción aumentando así la durabilidad, además de un tratamiento suplementario, llamado XSP, que comparten la versión Gold y plata, con el que la suciedad se adhiere en menor medida.
KMC tiene otros modelos más económicos, aunque ésta es la estrella de la gama.